Walter Scheidel, profesor de Cultura Clásica, y Elijah Meeks, especialista en Humanidades, dos profesores de la Universidad de Stanford, se plantearon crear una plataforma que recrease fielmente el modo en que los antiguos romanos percibían el tiempo y las distancias, y calcular al detalle, como si de un Google maps de la Antigüedad se tratara, cómo sería un viaje de la época.
Orbis, que es como han llamado a este atlas multimedia, está ambientado en el año 200 de nuestra era, el momento en que el poder de Roma se hallaba en su máximo apogeo y el Imperio había alcanzado su mayor extensión territorial, que abarcaba tres continentes. La plataforma, que recrea digitalmente y de forma interactiva el sistema de transporte romano, contiene los datos de 751 lugares, casi todos ciudades y villas, pero también 268 puertos, los principales ríos navegables y numerosas rutas marítimas.Las vías que recorrían el Imperio en esa época abarcaban 85.000 kilómetros, un total de seis millones de kilómetros cuadrados.
Así, el usuario que quiera realizar la simulación de un trayecto como si viviera en la antigua Roma sólo tiene que acceder a Orbis, poner un origen y un destino y pulsar «calcular ruta». El programa ofrece el camino más corto y la duración del viaje. Además,el usuario puede elegir estación del año para tener en cuenta la meteorología y escoger diferentes opciones para viajarpor carretera (a pie, marcha militar, a caballo, en carro…), y también puede viajar en barco tanto por mar como por río. Más opciones son elegir el camino más corto, el más rápido, e incluso el más barato.
Walter Scheidel se inspiró para crear Orbis en un mapa interactivo del metro de Londres. En él, en lugar de la distancia a recorrer, se representaba el tiempo real del trayecto. Un poco después, Elijah Meeks se incorporó al proyecto. Ambos añadieron a su plataforma asimismo datos de latitud y longitud del Proyecto Pleiades, un diccionario geográfico online de lugares antiguos, y también incorporaron las redes de vías del Atlas Barrington de Grecia y Roma.
La idea de este equipo multidisciplinar de la Universidad de Stanford es mostrar cómo los romanos de aquella época percibían los viajes, el tiempo y su distancia.